El interés por la Antártida fue creciente y han existido países pioneros en el descubrimiento y en la ocupación del continente. El interés científico, en especial el geográfico, fue el impulso que motivó a expediciones desde varias partes del mundo a aventurarse en las heladas y tormentosas aguas que circundan al continente.
Ante el incremento de expediciones científicas y militares, hubo interés de los Consejos o Asociaciones Científicas de establecer una metodología para las investigaciones y mejorar el conocimiento junto a la logística para saber más de las regiones polares. Es en este contexto que se lanzan los Años Polares Internacionales, con la intención de dejar un sólido legado a las generaciones futuras. También, es importante citarlo, que había un trasfondo geopolítico entremezclado con las investigaciones para el mejor posicionamiento de las potencias con intereses antárticos.